Fórmate, mantente en movimiento, trabaja, conviérte en una persona que merezca la pena conocer, lucha por superarte cada día, sal de la zona de confort, blablabla.
Hacerse autónomo es un desafío, ya te lo habrán contado otras veces y lo habrás leído otras tantas, haz caso.
- Si sientes dentro de ti esta ansia emprendedora y unas ganas infinitas de lanzar tus propios proyectos.
- Si notas que cada hora que estás encerrado/a en esa oficina parece eterna y quieres que llegue de una vez el momento de bajar la valla y largarte a casa.
- Si lo primero que piensas cada mañana al despertar es “no quiero ir” y una fuerza venida de otro mundo te empuja a quedarte en la cama.
- Si piensas que para qué contar esa idea que tienes en mente si va a caer en saco roto.
- Si en tu cabeza retumba todo el rato el “yo no valgo para ésto” o “quiero trabajar para mí”.
Déjame decirte que te entiendo, que sí se puede y que ha llegado el momento de que te plantees dar un golpe en la mesa y lanzarte al vacío.
Debería hablarse más de lo que se siente el día que te plantas en una asesoría a que te informen de cosas de las que no habías oído hablar nunca antes.
Declaraciones de IVA, el IRPF de nosecuánto %, los pagos 30/60/90 y una retahíla de conceptos que puede que no llegues a entender pero que tendrás que comerte con patatas.
¿Cuánto debería cobrar para que me queden X euros limpios a final de mes? ¿Cómo hago para captar clientes? ¿Debería bajar el presupuesto para ir generando portfolio? ¿Qué pasa con lo de trabajar gratis al principio?
Tranqui, cogerás marcha y movimiento, las personas con talante emprendedor desarrollamos habilidades para guisárnoslo y comérnoslo.
Si tuviese que darte alguna recomendación sería la siguiente: cree en lo que haces, búscale el sentido para que merezca la pena el esfuerzo e intenta que alguien que lo haya hecho previamente te ayude a dar los primeros pasos.
Internet se ha invadido de post de blogs en los que intentan convencerte de que emprendiendo tu propio negocio podrás generar miles de euros trabajando desde la playa.
Claro que llegará ese momento, soy esencialmente optimista, pero créeme que el inicio no será un paseíto por la playa; inspírate, dosifica energía y mantente en movimiento… ya llegarán los progresos y, con ellos, los euros.
Después de varios meses NON STOP! fui consciente de que me había planteado unas prioridades profesionales muy interesantes pero se me había olvidado un factor clave en la ecuación: mi vida personal.
Por eso cree “Atardece que no es poco”, un portal con fotos del Paraíso Galicia para pararme cada día a observar y respirar.
Porque ningún proyecto llega a buen puerto si el/la que lo encabeza no está con energía al máximo.
¡Respira… inspira!
¡Qué buen artículo! breve, pero precioso 🙂
Los comienzos son tremendos… esa primera declaración trimestral, seguir logrando clientes, precios, servicios, mercados, otros proyectos…
¡menuda aventura!
Gracias por compartir estas pequeñas reflexiones
Muchísimas gracias a ti por leerlo Aurelio!