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Descripción
Ser freelance suele ser un camino bastante solitario, salvo que te hayas lanzado a probar junto a otrxs compis de trabajo o estudios.
Después de varios meses dándole muchas vueltas a las cosas me di cuenta de que me estaba equivocando en la forma de enfocar los proyectos, cediendo siempre a favor de los demás y olvidando mis iniciativas y prioridades.
Por eso cree un decálogo, para que no se me olviden ciertas cosas; y porque yo soy muy de «consejos vendo y para mí no tengo».
Así que lo imprimí y ahora lo tengo en mi oficina, modo diploma del título del que estás más orgullosx.
He decidido compartirlo por si hay más personas en la sala que priorizan el bienestar de los clientes sobre el suyo… el último «check» del decálogo es precisamente ese: disfruta de lo que haces.
Descárgatelo, ya me contarás.